Encriptado, enjaulado, con los ojos vendados,
con la sangre gastada, con la piel ya rasgada.
Busco, busco vidas que no tiemblen,
que sepan mirar, mirar de frente,
que sepan escuchar, escuchar a la vida
que a gritos te pide que no la camines en vano,
que tus pasos no sean livianos.
Aprovecha el andar
y enseña realmente lo que es caminar.
Y no tengas miedo, esta vida tiene que cambiar
por pasos de autores grabados,
en un muro de libertad.
martin willenberg